Hoy es el momento más sencillo en la historia de la humanidad para pensar en grande. De toda la historia! En este artículo vamos a ver cosas que tu puedes implementar para empezar a pensar de maneras que nunca antes habías pensado.

¿Qué es Imposible?

Imposible es que tú y un grupo de personas decidieran crear una pirámide en Egipto sin contar con gruas.

Imposible sería que tu inventaras una máquina que pese toneladas y toneladas y le digas a 400-500 personas que se suban a ella y vuelen por 4.000 kilómetros. “No se va a estrellar, estarán bien” y mil millones de personas te dijeran “ok, te creo”.

¿Aterrizar el la luna por primera vez? Nunca se ha hecho antes, ni siquiera sabemos que hay ahí arriba… eso es imposible.

Hoy en día para un emprendedor pensar en grande es muy fácil.

Requiere energía, requiere que conozcas la fórmula, requiere esfuerzo, deseo, pero si eres alguien que está leyendo esto y pensando “quiero pensar en grande”, vamos a cubrirlo ahora mismo en este artículo.

Los Sospechosos De Siempre

Usualmente escucharás sobre: Libros, contactos, el ambiente.

Tienes que leer estos libros, tienes que tener los contactos correctos, tienes que moverte en el ambiente correcto. Absolutamente, estos son los principales sospechosos.

Lo que veremos a continuación no descarta todo esto, debes hacer esto, pero lo que veremos serán temas que no se mencionan seguido.

Apoyate en la Matemática

Algo que me encanta es mirar todo lo que tiene que ver con pensar es grande desde el punto de vista de la matemática. La matemática tiene mucho que ver con pensar en grande.

Es muy simple, mira:

Si puedo ganar 3 dolares, ¿Puedo ganar 4 dolares? Estarás de acuerdo que si, por supuesto que puedo.

Si puedo ganar $100, ¿Podría ganar $200?

¿Si puedo ganar $1.000, puedo ganar $2.000? ¿Si puedo ganar $2.000, puedes ganar $3.000?

Y esto no termina nunca. Solo termina cuando dejas de aplicar matemática. No hay un número final.

Los mil millonarios parecían imposibles hasta que alguien fue y lo consiguió. Ahora Elon Musk podría potencialmente ser el primer billonario si todos sus planes tienen frutos.

Debes tomar estos números que parecen imposibles, saber que son solo números, no hay nada que temer. Es simplemente matemática.

La diferencia entre alguien que piensa en pequeño y alguien que piensa en grande es la multiplicación.

El gran pensador está multiplicando, el pequeño pensador está sumando.

Empieza con cualquier número que creas que es demasiado grande, un número que no puedas alcanzar. Míralo como el número que no has logrado todavía, es solamente eso.

Redúcelo a un número más pequeño, y reconoce que hay un camino que puedes seguir para convertirlo en el número más grande.

Confianza En Tus Ideas

El siguiente punto para pensar en grande es saber que cualquier idea que tengas, sin importar que tan grande sea esa idea, necesitas tener confianza.

La confianza aparece con pequeñas victorias. Si puedes tener pequeñas victorias en un juego, o en los negocios, eventualmente empezarás a creer que puedes tener grandes victorias.

Pero una gran victoria no sucede de la nada. Sino que es la combinación de muchas, muchas pequeñas victorias, una después de la otra persistiendo y sin deternerse. Hasta que de repente tienes una victoria enorme.

Prueba Tus ideas

Digamos que tienes una gran idea, quieres hacer algo que nunca se ha hecho en tu rubro antes.

Lo primero que quieres hacer es contarle esa idea a 5 personas y ver si puedes convercen al menos a una de ellas.

Consigue 5 personas, de tu equipo, familiares, amigos. Reúnete con ellos individualmente y cuéntales tu idea, analiza sus reacciones. Si puedes convencerlo al menos un poco, ahí está tu primera validación de tu idea.

Yo siempre soñé con comprarme un BMW. Cuando vivía en Buenos Aires había varios consecionarios de BMW cerca de mi departamento, por lo que, cuando no tenía nada que hacer, me paseaba por ellos.

La intención era comprobar si podía convencer al vendedor de que yo era el tipo de persona que compraría un BMW.

Si recorres el lugar y nadie se acerca a hablar contigo, mala suerte. En cambio si se acercan a ti y comienzan a hacerte preguntas, entonces es que creen que podrías comprarlo.

Los humanos somos criaturas muy capaces incluso hasta cuando no nos damos cuenta.

Por el solo hecho de como te mueves, como es tu lenguaje corporal, tu manera de mirar a los ojos, estás vendedores emitirán un juicio instantaneo.

Si puedes convencerlos a ellos, entonces es totalmente posible, solo queda convencerte a ti mismo.

Estudia A Las Personas

Con esto me refiero no solo estudiar a las personas que admiras, sino estudiar a las personas que ellos estudiaron.

Por ejemplo, no solo estudies a Michael Jordan, también estudia a David Thompson. Pero no solo estudies a David Thompson, estudia a quien él estudio, y ve aún más allá.

Yo solía estudiar a la gente que admiraba del mundo de los negocios, y solía pensar “¿Qué hace a ese hombre tan especial? ¿Ha quien ha estudiado?” Ha estudiado a Teddy Roosevelt, a estudiado al entrenador Bear Bryant, a estudiado a Churchill. ¿Porqué será que estudió a esas personas?

“Esta otra persona es tan estratégica. Ha estudiado a Alejandro Magno, a estudiado a Darius. ¿Porqué los estudió?”.

Ve cada vez más profundo.

Lo que lograrás con esto es ver que la persona que admiras en un momento tuvo dudas, y estudiaron a otras personas que infundieron confianza en ellos, convicción de que podían ser la persona que son hoy, que tu admiras.

Así que ve a estudiar a quienes ellos estudiaron y te dará una fuente de inspiración, saber que algún día podrás ser esa persona a quien admiras.

Explota Tu Imaginación

Los grandes pensadores se reúnen con otros grandes pensadores. Hoy tuvimos una reunión, las ideas volaban e íbamos escribiendo todo en el pizarrón. Qué tal si hacemos esto… qué tal si hacemos lo otro… de repente Mario dijo algo que boom! Y eso llevó a que Paul dijera otra cosa, y Tom respondió otra, todo terminó en una idea enorme.

Semillas y semillas, y las raíces siguen creciendo y creciendo, hasta que explota, y de repente tienes una idea masiva.

Así que practica la imaginación, especialmente si es entre un grupo de personas que piensan en grande.

El basketball solía ser todo de Reebok y Converse, hasta que un día alguien imaginó lo que pasaría si Nike trajera a Michael Jordan, hoy en día el basketball es todo de Nike.

Ni siquiera tienes que ser un emprendedor, puedes estar trabajando para uno, para una empresa, y salir con una idea que pueda llevar a esa empresa al siguiente nivel. Y no pasaría sin ti, porque tu eres el gran pensador.

Baja El Volumen del Ruido

Estamos hablando de diferentes tipos de ruido. Demasiadas redes sociales, demasiado tiempo en las secciones de noticias, demasiado tiempo con familiares negativos, demasiado tiempo con amigos vagos.

¿Tu crees que los grandes pensadores están viendo cada cosa que sale en las noticias? Claro que les dan un resumen a diario, porque deben estar al tanto, pero si te estás metiendo de lleno, si estás leyendo cada cosa que pasa. Eso es ruido, demasiado ruido.

Lo que pase en la política no va a cambiar tu vida, no va a cambiar tus hábitos, no te harán un mejor emprendedor, no te ayudará a que se te ocurran nuevas ideas.

Lo que hará en cambio es consumir tu mente con cosas que no deberías estar pensando, cosas que te harán molestar.

Baja el volumen del ruido de los familiares que no te apoyan en lo que quieres hacer. Ni siquiera hables de tus ideas en frente de ellos. Si sabes que hablar de tu idea va a generar negatividad de su parte, no lo hables en frente de ellos.

Frena todas las distracciones, toda la negatividad, haz tiempo para pensar en que podrías hacer para pensar más grande en los negocios.

Cómo Pensar En Grande

Todo este contenido es originario de Patrick Bet-David How to Think Big as an Entrepreneur.

La verdad que, no me canso de decirlo, Patrick es un genio. Incluso cuando algunas de las cosas que plantea sobre pensar en grande son de sentido común, la diferencia está en hacerlas, llevarlas a cabo.

Puedes leer y aprender sobre emprendedurismo, pero tu potencial saldrá a la luz cuando actúes sobre las cosas que aprendas.